Les presento a Teresa, una niña menuda de clase media, que vive oprimida por sus “amados” padres quienes no la dejan ni siquiera salir con una amiga por temor a que termine siendo Cachapera o con cualquier hombre de su colegio por que temen que termine cargando una pequeña teresita en su vientre.
Pero no por ser oprimida significa que no sea de libre espíritu… no! No me malinterpreten, Teresa bien puede ser una fiera sin jaula, ella es la hija de la noche, la hija de la calle… quien debajo de todas sus caras de inocencia esconde un espíritu obsceno y sucio que debe ser alimentado constantemente.
Pero no por ser oprimida significa que no sea de libre espíritu… no! No me malinterpreten, Teresa bien puede ser una fiera sin jaula, ella es la hija de la noche, la hija de la calle… quien debajo de todas sus caras de inocencia esconde un espíritu obsceno y sucio que debe ser alimentado constantemente.
Todos los días sin el conocimiento de sus padres Teresa, quien vive cerca de la avenida Libertador, se escapa con sus amistades a varios clubs y bares de la zona de Sabana Grande, nombremos el Moulan rouge por citar un ejemplo… donde realizan cualquier tipo de ritos extraños que debido a su naturaleza no puedo nombrar, además de la típica borrachera, consumo de drogas, etc.
Un día, era la una de la madrugada, y Teresa y su mejor amiga Michelle iban caminando desde Sabana Grande hasta su casa. Caminaban por las aceras llenas de mierda de la libertador mientras poco a poco se aproximaban a su destino.
No lejos de 50 metros de su casa se aparecen un grupo de travestís y hermafroditas quienes rondan la avenida de noche llamadas las “Jineteras del siglo 21”. Estas travestís no son del tipo normal, de lejos pueden parecer personas normales pero en realidad tienen todo su cuerpo deforme, con pechos en el cuello, caras mal operadas, miembros de ambos sexos, en fin, ¡unas bestias!
Teresa y la amiga siguen su camino pensando que no las iban a notar y además estaban demasiado drogadas y borrachas para preocuparse. Pero se equivocaron, las travestís las agarraron y realizaron cualquier cantidad de actos obscenos en todos sus orificios corporales y las pobres inocentes no pudieron resistirse, cuando concluyó el acto cortaron sus miembros, algunas de ellas caníbales tuvieron su cena y los restos los escondieron debajo de las sorprendentes plantas que se acaban de poner en La bella avenida.
BIENVENIDOS A LA NUEVA AVENIDA LIBERTADOR, UN DESTINO ALTERNATIVO PARA TODO AQUEL QUE BUSCA DIVERSIÓN.
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